6º Etapa

6º Etapa

Scuol (Suiza) - Mals (Italia)

Distancia 37km, desnivel positivo  1332, desnivel negativo 1474

Antes de amanecer ya estabamos desayunando el albergue de Sent, a unos tres kilómetros de la salida.

Tras coger un autobus local, llegamos a Scuol de los primeros, pero fue inevitable por el horario de los transportes.

Nada más llegar, visita de Jorge a el Rescue Team (botiquin) para que le apañaran los pies.

Poco a poco la plaza se lleno de corredores, hoy día clave, solo tres para el final, terminarlo sería un gran subidón de motivación, y más bien el acabar, el como acabarlo.

Una vez en los cajones de salida el cielo empezo a retumbar, eran las aspas de un helicoptero de la prensa que grababa nuestra salida, y por sexta vez al ritmo de Highway to hell comenzó la carrera.

Para variar, los primeros kilómetros de asfalto u hormigón, hicimos los seis kilómetros de más rápidos sin ser bajada de toda nuestra TAR.

Nos encontrábamos con ánimos, era el día de Asturias, no quisimos correr con la bandera porque la reservamos para el último día, pues tenemos miedo que utilizarla antes nos de mala suerte.

Al fin al asfalto se convirtió en pista y comenzó la subida, cambiamos la carrera por el trote, para al final resignarnos y sacar los bastones...

Por enésima vez nos cruzamos con nuestras cuatro amigas, el un equipo suizo y otro alemán, que en los seis días de carrera nos habremos curzado unas 20 veces... Cada vez que nos cruzamos nos echamos unas risas...

El terreno vuelve a cambiar y comenzamos a subir un Desfiladero, hasta el momento la parte más espectacular de la TAR, era impresionante ver a cientos de corredores a lo largo de esos canales huecos de la montaña con una caida al vacío de las que asustan...

Era imposible no pararse a sacar fotos...

Tras terminar esa zona, comenzamos un largo rodaje por los valles ya de tierra italiana, nos quedaba solo una última subida y el resto todo a favor.

Durante esta etapa, nos cruzamos con varios corredores parados, alguno incluso derramando lágrimas de dolor, amigos del Camp de los Dolmitas, o compañeros que conocimos esta semana. La mayoría con problemas con heridas en los pies, o molestias musculares, y os puedo asegurar que muchas ni la mitad de grande que las de Jorge, por eso que de admirar este final de TAR que está haciendo mi compañero, pues apenas lo he visto quejarse, ni pararse, mas rápido o más lento, continua adelánte, el objetivo está cerca y puede más que el dolor.

Tras la citada útima subida, comenzamos una larga bajada hasta el último avitullamiento, tuvimos que ir a ritmos bastantes moderados, las sobrecargas musculares a estas alturas podian ser decisivas, y además hoy no había vendado mi tobillo creyendo que no haría falta, y sin embargo a mitad de bajada comenzó a quejarse, una pequeña pero molesta inflamación el el Tibial que llevo arrastrando toda la semana.

Tras el último avituallamiento en el que apenas paramos comenzaba de nuevo lo más feo de la carrera, otros seis kilómetros de puro asfalto hasta Mals, el que corra este tipo de carreras sabe lo duro que es ese cambio para las articulaciones, y más cuando ya llevas seis días de carrera.

Pero pudimos, una vez más, más de cinco horas de carrera, y algún que otro kilómetro más del que había anunciado la organización cruzamos la meta, hoy si que realmente casi podemos sentir el tacto de la camiseta de finisher en nuestra piel, solo quedan dos retos, mañana subir a mas de 3000m con una bajada final de las que hacen daño y el sábado paseo hacia la gloria...... Ojala sea tan facil hacerlo como escribirlo...